23 abril, 2024

Sant Jordi 2014 (de Princesita)

 Princesa saca el último lápiz de la caja y, mientras se lo entrega a Dragón, le advierte “Es el último lápiz que te doy. Los lápices no son para comer, son para escribir, ni siquiera has conseguido escribir media letra sin antes comerte el lápiz, así será imposible enseñarte”. Pero el Dragón es muy listo y aprende rápidamente.

Entonces Princesa divisa a lo lejos otro incordio de caballero que, como todos, pretenderá salvarla del dragón y conseguir la fama, sobre todo esto último. Ya es el sexto y Princesa no puede más con tanto caballero; si cada dos por tres te están intentando matar ¿como quieres que Dragón se concentre? 

Cuando el caballero llega a la cueva en la que estudiaba Dragón, él ya vuela alto con Princesa en su curvado lomo sin dejar de batir esas portentosas alas que tanto le gustan a Princesa, dirigiéndose hacia un lugar en el que los estúpidos caballeros no puedan encontrarlos.

Pero Sant Jordi no es un caballero común, pues no se plantea cazar al dragón, ni tampoco perseguirlo, Sant Jordi ha entendido lo que están haciendo. Llama con un movimiento suave de la mano a Dragona y juntos remontan el cielo hacia sus amigos, puesto que sin cruzar una sola palabra saben que lo son. 


Sant Jordi saca unos lápices mordisqueados de su bolsillo.


Violeta


No hay comentarios:

Publicar un comentario