El espiritu de la navidad

Yo soy un recio montañero. Un hombre hecho a los duros inviernos, me gusta sentir el frio en mi piel. Aun asi, estas navidades los reyes magos me trajeron un bonito gorro de lana. Pense que los reyes eran realmente magos, por que el gorro estaba hecho con las mangas de un viejo jersey que solia usar mi novia, que tambien es una recia montsñera. Me gusto el gorro como les gustan las cosas a los gañanes, y lo guarde en el cajon hasta ayer. Ayer, hacia un viento de mil demonios. Nos calzamos los esquis a primera hora y me cale el gorro protejiendome las orejas, cuando de repente oi una voz detras mio que decia "perruquito, perruquito!". Me gire, pero lluis no habia dicho nada, además, solo hay una montañera recia que pueda decir "perruquito", pero ella no estaba alli. Cosas del viento, supuse. Pero me equivocaba. Nos pusimos en fila india sobre una nieve rutilante, en el cielo ni una sola nube, y un viento celoso que intentaba robarle calor al sol, y yo empeze a oir una canción conocida, no dentro de mi, tampoco habia nadie cantando, y definitivamente no era el viento. Asi que tenia que estar cantandomela el gorro mago. La ascension se impuso solitaria, juntos pero callados, a buen ritmo, cada uno con la soledad que impartia el viento, abriendo traza felizmente y el gorro haciendome comapañia, cantando a todo pulmon, haciendome cosquillas en las orejas y hasta oliendo a ella. De no haber sido un recio montañero hasta se me hubiese ocurrido que algo romantico me pasaba, que mi cabeza estaba llena de pajaros, pero la explicación es mucho más clara, se trata de un gorro magico, es un gorro impregnado con el espiritu de la navidad, y por ese motivo estuvo toda la bajada exclamando "uala!", al igual que lo ubiese echo mi recia montañera, cada vez que tomaba un giro.